martes, marzo 06, 2012

Lo que me gusta de un hombre.

Últimamente he estado un poco corto de tiempo. Han sido semanas difíciles en la facultad,  y no he tenido tiempo de actualizar el blog por ello.
Así que, para no dejarlo en el abandono, les dejo este pequeño entremés, una entrada con pocas palabras (más no por ello poco significado), y varias imágenes; sin embargo, el miércoles tendré un breve respiro, así que esperen entonces una nueva publicación en forma.
Sin más, los dejo con la entrada... Después del salto, pues es un poco NSFW. ¡Adelante!

En esta serie, les contaré poco a poco aquellas características que hacen a un hombre alguien irressitible para mí.


Para empezar, lo que más me gusta de un hombre es... Precisamente, ¡que sea hombre!


¿Redundante? Puede ser, sin embargo, es una característica esencial.
Sin llegar al extremo del machismo, me gusta sean viriles, que disfruten y expresen su hombría.
Sé que cada quién tiene derecho a ser como más le guste ser, y lo respeto totalmente; pero para mí, un hombre pierde mucho de su atractivo si tiene o  busca acentuar rasgos androgénicos, o se decanta por conductas afeminadas.


Así que, como dice el dicho, "ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre": Me gusta el balance, podría resumirlo con la imagen clásica de un caballero, alguien educado y encantador, pulcro y arreglado, que cuide su imagen sin sacrificar su virilidad, ni implicar conductas sexistas.


Que tenga un trato amigable y franco, jovial y fresco.


Que sea directo, pero moderado y diplomático.


Que sea maduro, y sepa adecuar su personalidad a cada situación: Que disfrute intensamente los momentos de diversión, deje fluir la pasión en la medida exacta cuando se le requiere, y sepa actuar con seriedad en situaciones necesarias.


¿Soy muy exigente? Tal vez, lo reconozco, pero vamos, todos tenemos derecho a soñar con nuestro propio príncipe azul... Que en mi caso, es tal vez una manera bastante literaria de describirlo.



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